Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de Córdoba

Fechas, apuntes y demandas académicas que generan ansiedad. Dispositivos electrónicos que resultan difíciles de ver o de comprender. Espacios áulicos que requieren adaptarse a estilos o demandas particulares para que la Universidad logre ser realmente un lugar que integre a toda la comunidad estudiantil.

Desde hace varios años, las políticas de accesibilidad académica y de inclusión forman parte de la agenda universitaria. Tras la pandemia, las nuevas tecnologías aplicadas a la formación de grado también se sumaron a esa agenda, pero ¿de qué modo esta forma de entender la Universidad, más allá de lo estrictamente académico, forma parte de los desafíos que se plantea la Facultad de Ciencias Químicas en el siglo XXI?

La creación de la Prosecretaría de Planificación, Inclusión e Innovación Educativa (PPIIE) ofrece señales sobre ese perfil. “En la UNC, hace muchos años que existen protocolos sobre accesibilidad vinculados con infraestructura, comunicación, aulas virtuales y diversas áreas, pero la realidad es que todas esas pautas no resultaban muy conocidas por la comunidad docente. Por eso, en la Facultad decidimos crear esta Prosecretaría como un espacio institucional desde el cual impulsar políticas de inclusión de manera transversal, de tal modo que, más allá de los protocolos, las y los estudiantes tengan la garantía de acceder a la educación superior en FCQ como ejercicio pleno de sus derechos”, describe Mara Parello, quien desde 2021 está a cargo de la nueva Prosecretaría.

Con el fin de aplicar las políticas que esta unidad académica define en materia de accesibilidad, la PPIIE trabaja junto al Área de Orientación y Asesoramiento Educativo (AOAE), que se ocupa de asistir a la comunidad de la FCQ en esos aspectos para promover la calidad de vida y acompañar las trayectorias educativas de estudiantes, en el marco de un enfoque de derechos humanos.

En ese sentido, su campo de acción es amplio y está orientado por el Protocolo de Actuación sobre Estrategias Pedagógicas Inclusivas –aprobado por resolución HCS 1386/2010- a partir del concepto de accesibilidad académica propuesto por el equipo de la Oficina de Inclusión Educativa de Personas en Situación de Discapacidad de la UNC.

“Se trata de un concepto “paraguas” que engloba aquellas condiciones y requisitos que cumple una unidad académica cuando no existen -o se suprimen- barreras que dificultan o limitan el acceso al conocimiento por parte de todas las personas implicadas en los procesos de enseñanza-aprendizaje, independientemente de su configuración biofísica y de sus atributos de género, edad, origen étnico o social”, explica el trabajador social Mauricio Mareño Sempertegui, uno de los integrantes del Área junto a la psicóloga Evangelina Gabetta Fontanella y la psicopedagoga Mariana Arruabarrena.

Hacia una educación sin barreras 

Más allá de las concepciones y de los marcos normativos, en la FCQ ya se vienen aplicando medidas que han permitido que tres estudiantes avancen de manera sostenida en sus carreras durante el último año. “Esto es posible a través del diálogo permanente con los equipos docentes y las autoridades de la Facultad, así como también con los equipos terapéuticos y de acompañamiento de estudiantes”, sostiene Mareño Sempertegui. 

El objetivo radica en las asignaturas, donde ya se vienen ejecutando líneas de acción relacionadas con el diseño e implementación de estrategias pedagógicas inclusivas, el diseño y aplicación de alternativas pedagógicas equivalentes y la disponibilidad de bibliografía y materiales de estudio en soportes diversificados y accesibles. Siempre, con el fin de suprimir las barreras de participación en las actividades académicas. 

Estas iniciativas se configuran a partir de diagnósticos que el equipo interdisciplinario lleva adelante junto a la Prosecretaría y docentes, quienes tienen un rol clave para que estas políticas se concreten. “Nuestra intervención profesional es con profesoras y profesores, orientando ajustes razonables o alternativas pedagógicas equivalentes, según lo estipulado en los protocolos de accesibilidad de la UNC y la perspectiva en derechos humanos”, comenta Evangelina Gabetta Fontanella.

Buenas señales

Las voces de las y los estudiantes de la Facultad son otros de los pilares en lo que se asientan estas políticas. En los últimos años, las principales demandas estuvieron relacionadas con el cursado de asignaturas y las instancias de evaluación, las cuales responden a modalidades estandarizadas del ejercicio de la práctica educativa.

En lo que va de 2023, el equipo viene trabajando junto a varios estudiantes con diagnósticos que exigen intervenciones específicas, como el trastorno de Asperger, la visión disminuida y el trastorno obsesivo compulsivo. En todos los casos, las diferentes acciones permitieron que la accesibilidad académica se tradujera en avances concretos.

“En la Facultad, lograron que se realice la intercomunicación necesaria con cada profesor para llevar a cabo un buen desempeño en mi carrera. Las pautas de accesibilidad me ayudaron en la comprensión de las consignas, favoreciendo en mi evaluación la posibilidad de dar a entender que he interpretado los temas”, aseguró una de las estudiantes, que cursa segundo año de Bioquímica. 

En tanto, otra estudiante de primer año de la misma carrera con trastornos de ansiedad manifestó: “Poder ir con mi perrita de soporte emocional para cursar y rendir me cambió la vida, siento que puedo estar presente en las clases y sin miedo de participar. Cuando tengo días difíciles ya no falto, sino que voy con mi perrita que me ayuda a tranquilizarme y a seguir aprendiendo. Estoy muy agradecida por cómo me ayudaron para que los profesores entiendan mi situación. Todos me han recibido de buena manera y cada vez me emociona más ir a estudiar lo que me gusta en la FCQ”.

Para 2024, el equipo de profesionales y la Prosecretaría tienen pensado consolidar la Comisión de Accesibilidad de la Facultad -creada en 2016 para implementar medidas de accesibilidad en temas edilicios, urbanos, comunicacionales y tecnológicos- y avanzar con la encuesta sobre accesibilidad como parte del trámite de Ingreso 2024, a partir de profundizar las experiencias que se fueron logrando este año. 

“Esta herramienta nos permitirá detectar si hay ingresantes con algún tipo de enfermedad crónica o discapacidad que requiera algún protocolo de acompañamiento específico para coordinar acciones con sus docentes acompañantes o, en caso de que no tengan, con nuestros equipos, de tal modo que desde la FCQ sigamos pensando y ejecutando nuevos modelos de evaluación, de cursado y de producción de materiales accesibles con una perspectiva adaptada a cada situación”, resaltó Mara Parello.